Si nos paramos a pensar en una página web que visitemos día tras día prácticamente sin darnos cuenta, es inevitable pensar en Google, el conocido buscador. Mucho ha llovido desde la fundación de este gigante tecnólogico en el año 1998 por los compañeros de universidad Larry Page y Sergey Brin; y es que tras una enorme cantidad de trabajo desde su residencia universitaria, han logrado convertirse en la que hoy en día es considerada como una de las mejores lugares para trabajar del mundo. Desde la adquisición de su primera oficina en Mountain View (California) Google posée hoy en día más de 70 oficinas repartidas a lo largo de más de 40 países por todo el mundo, y a diferencia de otras empresas, no hay dos oficinas de Google iguales. Aún así, todas comparten características comunes que las identifican y otorgan la fama que tienen, entre las que podríamos destacar la decoración colorida, salas de ocio, gimnasios, cafeterías… No hay duda de que no se trata de la típica oficina aburrida y sumida en la monotonía, pero, ¿qué las hace diferentes?
Las oficinas de Google tienen fama de ser muy distintas al resto, y no es para menos. Trabajar para Google significa trabajar en una de las empresas tecnológicas más punteras e innovadoras del planeta, y esto ha de traducirse de algún modo en sus instalaciones. La poca normalidad de sus oficinas es de sobra conocida por muchos trabajadores del sector tecnológico, que sueñan con poder unirse a la plantilla algún día. Esta empresa se creó con la idea de que el trabajo tiene que ser visto como una especie de desafio y que por eso mismo, afrontarlo debía ser divertido. En base a ese mandamiento es como han diseñado todas y cada una de sus oficinas, oficinas en las que se derrocha talento y se respira creatividad, y es que en Google piensan que para tener buenas ideas hay que trabajar en un ambiente adecuado, ya que no hay duda de que un trabajador que se encuentra a gusto y satisfecho rendirá mucho más que otro que se encuentre constantemente presionado y agobiado.
Es por esto que en Google se les otorga tanta libertad a los trabajadores. El principal objetivo es tener un ambiente propicio en el que todos estén inspirados y la creatividad esté al orden del día y para ello, le otorgan una gran importancia a que sus espacios sean únicos, acogedores y divertidos. De hecho, las oficinas parecen más bien un lugar de ocio que de trabajo, ya que podemos encontrar restaurantes, gimnasios, piscinas, salas de videojuegos, espacios de meditación y reunión, y un largo etcétera. No solo eso, sino que si trabajases en una de ellas, podrías incluso llevar a tu perro al trabajo o dejar a tus hijos en la guardería ubicada dentro de sus oficinas. Además, los trabajadores pueden comer gratuitamente en cada uno de sus múltiples restaurantes temáticos donde podrán saborear platos de todo el mundo. En definitiva, todo ello para lograr que los trabajadores se sientan tan cómodos o mejor que en casa y vayan al trabajo con ganas de darlo todo.
Por supuesto, en Google no todo es diversión, y es obvio que todos los trabajadores realizan una serie de labores importantes. A pesar de que cada trabajador tiene su propio espacio que puede personalizar a su gusto, en Google se hace incapié en el trabajo y los logros de equipo, aunque los exitos individuales tambien contribuyen a esto último, y por ello hay tantos espacios de reunión en los que poder entablar conversaciones sobre cualquier proyecto y generar nuevas ideas. En definitiva, el lugar de trabajo que siempre habías soñado, existe.
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Por Sergio Asenjo.