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 Michael Hudson en un economista reconocido a nivel internacional y profesor de la Universidad de Missouri, Kansas City. Ha sido consejero del gobierno americano y canadiense, así como de países como México y Letonia. También ha sido economista del Chase Manhattan Bank, donde colaboró para establecer el primer fondo de deuda soberana.

Hudson dice lo siguiente:

La crisis europea de deuda se trata literalmente de una guerra financiera de los bancos contra la sociedad y las personas.

En otra entrevista dice que lo sucedido en Grecia terminará llegando a EEUU en breve (y por supuesto a España también). Pues los bancos han trasladado toda su basura a los gobiernos, quedándose ellos una deuda pública que se va a pagar con los impuestos de todo el mundo. A continuación, para que esta deuda pública sea solvente y no descuadre los balances financieros, los bancos están forzando a los gobiernos mediante las agencias de calificación para que se liquiden multitud de activos, se reduzcan salvajemente los gastos y se terminen acometiendo estrictos ajustes fiscales acompañados de brutales subidas de impuestos.

Es evidente que los estados tienen soberanía y capacidad de negociación para, después de los rescates, forzar la banca para que asuma todas y cada una de sus pérdidas. Por lo que una vez se les ha ayudado, los gobiernos deberían cuadrar a las entidades financieras para que fueran ellas las que liquidaran sus activos y asumieran sus pérdidas, junto con sus accionistas. Haciéndolas además reducir de tamaño para impedir nuevos riesgos sistémicos. Pero está sucediendo justo al revés, de forma que son los inocentes ciudadanos quienes van a terminar pagando con sus impuestos unos gravísimos errores empresariales que los magnates financieros no quieren asumir en ningún caso. Para conseguir su propósito están empleando multitud de tretas, coacciones y por supuesto sobornos de todo tipo al más alto nivel. A este sistema sólo se le puede llamar “NEO-FEUDALISMO” y “MEGA-CORRUPCIÓN”. La gente de la calle tiene que despertar urgentemente, a no ser que desee quedar reducida a la pobreza extrema y perder sus derechos sociales con la destrucción programada de la clase media. Es necesario por tanto buscar una regeneración política que sepa representar mejor a la sociedad y poner coto a la codicia de la banca.

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Por otro lado, tenemos esta brillante entrevista de Max Keiser al famoso economista independiente australiano Steve Keen. En ella dice textulmente lo siguiente:

Se está produciendo la mayor transferencia de riqueza de la historia, desde los bolsillos de las personas hacia los balances de los bancos, con el objeto de trasladar sus pérdidas contables a la pobre gente de la calle. Unas pérdidas que además son fruto de una actividad empresarial fraudulenta y absolutamente delictiva. Las últimas burbujas financieras y sobre otros activos como la vivienda y muchas materias primas, han sido provocadas por los grandes bancos y sus agentes comerciales con el único propósito de obtener unos beneficios obscenos… Miles de millones que por supuesto también han salido de los bolsillos de la gente sencilla de la calle, cuya única culpa es no entender lo que está sucediendo para poder lanzar toda la fuerza de la ley contra esta élite financiera terriblemente corrupta y peligrosa. Si, en efecto, es necesario restaurar de una vez el poder de la ley.

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A diferencia de toda esa verborrea y chalaneo de nuestros corruptos politicastros, queremos ponerles unas gráficas que les aclararán lo dicho mediante muy pocos conceptos fáciles de comprender. Algo que la casta del Congreso de los Diputados es icapaz de hacer por el pavor que les produce la ira popular y el miedo a perder sus abundantes privilegios.

Estos son los CDS de la banca hasta la quiebra de Lehman, momento crítico a partir del cual se produce un glorioso milagro, pues a pesar del riesgo sistémico sus diferenciales se hunden drásticamente. ¿Por qué?

Pues es sencillo de entender: porque se hizo un “transfer”. Es decir, se pasó la pelota a los gobiernos. Y los estados más débiles fueron los que antes pagaron el pato. Así que ahora hay que “meterles en cintura”, cuando la cintura que debería haberse reducido es la de los obesos banqueros. No cabe la menor duda.

Al mismo tiempo, aunque es cierto que hay una importante saturación de deuda, no es menos verdadero que hay también muchísimas empresas solventes que no encuentran financiación. ¿Por qué? En el caso americano sucede lo siguiente. Según el profesor John Masson, antiguo economista de la Reserva Federal,

parece ser que gran parte del estímulo monetario del Sistema de la Reserva Federal se ha fugado hacia el mercado de Eurodólares, hacia las ramas exteriores de los bancos americanos. Por eso el efectivo permanece plano en las pequeñas entidades financieras americanas. El dinero no se pone a disposición del cliente en ventanilla porque se está llevando hacia los mercados exteriores y los activos cotizados. Los préstamos son para esas ramas en el extranjero.

El resultado es que los CDS de los bancos estaban disparados porque habían perdido gran parte de su capitalización en el mercado por su manifiesta insolvencia. El “transfer” sólo sirvió para sanear en parte sus balances y recuperar algo del anterior tamaño en bolsa, que es donde fue a parar el dinero principalmente desde el mercado de Eurodólares. Pues una buena capitalización bursátil es el mejor activo para un banco.

Y aquí las gráficas por lo que respecta al efectivo, que depositado en la Fed es desde donde se operaba para la recompra de los activos financieros. Si todo ese dinero hubiera llegado a la calle ahora habría menos desempleo, por supuesto.

Por lo tanto, ya lo ven. De los bolsillos de la gente a los bolsillos de la banca.

Fuente: Qmunty


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3 Responses to "Esta crisis no es una “Gran Depresión”, sino el “Gran Robo” de la banca"

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