– Perdón por llegar tarde a la junta, mucho tránsito hoy.
– Oye… ¿manejas hasta acá?.
– Por supuesto que sí, me toma alrededor de 45 minutos.
– ¿Qué ya no vives en Avenida Grande 1234?.
– Si, todavía vivo ahí ¿por qué?.
– Pues ¿no has pensado tomar transporte público mejor?. Cuando yo vivía cerca de tu casa prefería eso: eran 20 minutos normalmente, y mucho más barato que manejar y pagar estacionamiento.
– No conozco las rutas, y sé que los itinerarios cambian un par de veces al año, así que prefiero manejar.
Imagen: Sitio Geek
– Bueno, podrías aprenderlas muy rápido, y de paso ahorrar tiempo y dinero.
– Mira, si el carro se descompone o hay una definitiva y buena razón para aprenderme ese sistema, lo haré y usaré.
– ¿Ahorrar tiempo y dinero no es una buena razón?.
– Estoy a gusto manejando ¿de acuerdo?. Si la ley o la empresa pide que utilice otros medios de transporte entonces lo averiguo. Ese tiempo no ha llegado ¿correcto?. Ahora estoy bien de éste modo.
– Bueno, pues… enfoquémonos al trabajo…
Y así es igual con nuestros sistemas de cómputo. Algunos tenemos accesos directos en nuestros escritorios para encontrar fácilmente aquello que necesitamos para trabajar. Si dichos accesos directos de alguna forma desaparecen, no sabemos llegar ya del punto A al punto B. Algunos otros tenemos documentos paso-a-paso los cuales seguimos al pie de la letra en aquellos casos en que las tareas no son tan cotidianas y tendemos a olvidarlas. Así, un dispositivo, una dirección, o un nombre cambia y las instrucciones y accesos directos tienen que ser recreados para dicho usuarios.
¿Entrenamiento, alguien?. Cuando toco el tema con algunos tomadores de decisiones, -increíblemente- algunas especulan que aquellos empleados que son entrenados son los que se van a la competencia. Otras no ven el valor del negocio en tener más personal literato en TI porque, bueno… ellos ya cuentan con dichas instrucciones y accesos directos en sus escritorios.
No se cuanta productividad se pierde por la gente que hace las cosas de la forma acostumbrada; en lugar de conocer y aplicar distintos modos de llegar a las metas. Sin embargo, estoy seguro que el negocio ahorraría mucho dinero (y aun mejor, tiempo) si el personal simplemente conociera otras formas de hacer dichas tareas. No es necesario, la mayoría de las veces, obtener certificados, diplomas, títulos y demás; a veces un simple curso básico o introductorio es lo que se requiere y más que suficiente para las más de las necesidades de dichas empresas.
De cualquier forma que lo veo, prefiero los 20 Vs. 45 minutos de trayecto.
Podríamos discutir que “Ese tiempo no ha llegado…” o cualquier otra excusa similar. Puede que esté totalmente fuera de foco dentro de los parámetros de tu empresa, pero independientemente de su área o tamaño, creo que ése tiempo está aquí y ahora.
¿Qué es peor que entrenar tus trabajadores y perderlos?. No entrenarlos y retenerlos.
-Zig Ziglar