eMarketplaces: A lo largo de la historia el hombre ha comprendido que es mucho más poderoso cuando actúa en coalición con los demás que tratando de enfrentarse a los problemas por sí solo. De todos es sabido que la unión hace la fuerza y más si cabe en un mundo tan voraz como el de los negocios, de modo que las pymes están abocadas a entenderse para aglutinar fuerzas frente a clientes y proveedores, como bien nos aleccionó Michael Porter.
Esta necesidad de alianzas se hace hoy en día aún más fuerte debido al proceso de globalización a nivel mundial, ya que ahora las empresas no sólo deben competir contra empresas locales, sino también contra poderosas empresas multinacionales que ingresan en el país, en teoría con mayores recursos y capacidades que las pequeñas empresas locales.
Dicho proceso de globalización ha sido posible gracias a entre otros factores, el gran desarrollo de las nuevas tecnologías, que permiten por ejemplo que una pequeña empresa de China pueda ponerse en contacto y entablar relaciones comerciales con otra en Europa.
Es por ello que en tales circunstancias, el grado de conocimiento y uso que una empresa haga de las nuevas tecnologías condiciona fuertemente su posición competitiva en el mercado, por lo que ha aparecido un nuevo concepto de alianza a través de internet denominado marketplaces.
De acuerdo con S. Kaplan y M. Sawhney, los mercados digitales son “intermediarios virtuales enfocados hacia sectores o procesos de negocio concretos que usan diversos mecanismos de generación de transacciones, con lo que facilitan la relación entre los diversos compradores y vendedores”.
Su origen se encuentra en la eterna búsqueda de economías de escala por parte de las empresas, en la cual el marketplace supone una importante herramienta, debido a que gran parte del trabajo que realiza un comprador con sus proveedores, puede ser aprovechado por otros compradores; como son la creación y mantenimiento de los catálogos, la formación de proveedores en los nuevos procesos, la conexión por parte de proveedores a una única aplicación o como el mantenimiento de una infraestructura tecnológica.
Existen 2 tipos de marketplaces:
Horizontales: Sus contenidos y servicios responden a las necesidades de las empresas, independientemente del sector de actividad; comercializan productos de todo tipo, como por ejemplo, materiales indirectos, financieros o logísticos.
Verticales: Están especializados en ofrecer bienes estratégicos de sectores específicos, por ejemplo construcción, energía, química o industria.
De entre los innumerables beneficios que reporta la pertenencia a un marketplace podemos destacar los siguientes.
1.- Para las empresas compradoras
Beneficios comerciales:
Acceso a más proveedores, productos y servicios tanto en cantidad como en calidad, ya que también es capaz de acceder a productos y servicios especializados difíciles de encontrar.
Acceso a información relevante y negociación transparente.
Beneficios de gestión:
Reducción de los costes de transacción por varias vías, ya que por un lado disminuye los tiempos de la búsqueda de información y aumenta su eficacia, pero por otro disminuyen también los costes al estar automatizado el proceso de compra.
Mejor control de los gastos y de la comunicación con el proveedor.
2.- Para las empresas vendedoras
Beneficios comerciales:
Incremento del número de clientes potenciales y oportunidades de negocio, además de reducirse el coste de acceso a nuevos canales de ventas y nuevos clientes.
Mejor comunicación y servicio al cliente y mejor información sobre el mercado.
Beneficios de gestión:
Servicios centralizados de facturación, cobro y financiación, con la consecuente disminución de costes de gestión comercial.
Mejora de la gestión de inventarios, actualización de catálogos y optimización de costes.
Como conclusión de todo lo anterior, se puede afirmar que quizás lo más importante de un marketplace no es el beneficio que reporta, sino el ahorro de costes que supone.
“Los Marketplaces o Mercados Digitales son una oportunidad para que las empresas constituyan Redes de Valor accediendo a multitud de servicios optimizando sus procesos de aprovisionamiento. Los Mercados Digitales serán un factor clave en la competitividad de nuestra economía”
Javier Aróstegui
Presidente Comisión B2B AECE
En principio y visto así, parece que son toda una ventaja para las empresas, ya que consiguen disminuir los costes de transacción al compartir información y reducir la incertidumbre.
Pero lo que allá por el año 2000 parecía que iba a ser la panacea de los negocios en Internet, con el tiempo se ha visto que no ha crecido del modo esperado, ya que las pequeñas empresas son todavía reticentes a invertir en algo en lo que no encuentran del todo el beneficio.
En el caso de las grandes empresas, que están muy jerarquizadas y que son difíciles de coordinar, integrar sus procesos en un marketplace es una clara ventaja, pero en el caso de una pequeña empresa en la que los procesos son más sencillos y apenas normalizados, quizá la ventaja de pertenecer a un marketplace no lo es tanto, al menos en ese sentido.
En el caso específico de España, el uso de los marketplaces entre las pequeñas y medianas empresas es actualmente muy bajo y a la hora de analizar las causas, hay que tener en cuenta el nivel de desarrollo tecnológico de las pequeñas empresas, además de su grado de organización.
En este sentido cabe destacar que según José Manuel Iáñez, Director de Espacio Pyme y líder del proyecto www.mymarketplace.org, el 52% de las pymes españolas disponen de conexión a Internet, frente al 71% de la UE y sólo el 15% de pymes españolas disponen de web propia, frente al 41% de media de la UE.
Con cifras como las anteriores y teniendo en cuenta la tradicional aversión de los españoles hacia las transacciones por Internet, e incluso uniendo todo ello a la crisis mundial, es fácil comprender por qué el desarrollo de este tipo de herramientas no ha sido el esperado.
Pero no todo son datos negativos. A pesar de ser un mercado totalmente nuevo y lleno de incertidumbres, podemos encontrar ejemplos de éxito como es el caso de SoloStocks, que se limita a poner en contacto a compradores y vendedores, pero lo importante es que funciona y ha conseguido ganarse una cierta popularidad.
Para concluir, parece que el futuro de los marketplaces en España pasa por atraer a las pequeñas empresas, pero para ello los marketplaces deben estar orientados tecnológicamente al nivel que las pymes necesitan, ya que normalmente los procesos que necesitan integrar son sencillos y por lo tanto, no ven la ventaja de integrarse en sistemas organizativos demasiado complejos.
Por último, según José Manuel Iáñez, parece ser que para las pymes la mayor motivación para incorporarse a un marketplace sería la de aumentar sus ventas, más que la de mejorar su información sobre el mercado, pero como ese aumento de ventas no parece estar garantizado, los marketplace deberán esforzarse más en el aspecto comercial para resultar más atractivos.
Por Jesus Manuel Miguel Genovés.